Afirmo continúa guerra económica inducida ante primera cola de 2017

Afirmo continùa guerra econòmica inducida

Fuente: La Voz del Río/ Comunidad

Por el Abg. Edinson Lares/ Opinión

Como todos los días, desde hace tres años, cumplido el recorrido personal por todas las panaderías que funcionan -aún- en los alrededores de la ciudad capital de La Asunción; dónde sus “dueños y encargados” al acompañar desaparecer de entre los anaqueles o muestrarios, productos como el pan salado en toda su presentación o conformación; y cuyos locales surtidos siempre en su gran mayoría de “pan dulce” y, muy poco o ningún pan salado, ahora esgrimen que la “harina de trigo” no es despachada por el gobierno, e igual, están señalando que “ellos -el gobierno- la desaparecen para hacer más penoso el cuadro de necesidad que vive todo el pueblo”. Claro que sin aclarar, que la “harina importada” está llegando a los puerto nacioales y es distribuida por empresas privadas; pero que entre la comercialización hasta las empresas del ramo, nadie explica “por qué se encarece cada día” un producto de la dieta diaria; así como sucede con la popular “arepa de maíz” de las y los venezolanos.

Eso sí, cuando crece la cola frente a las panaderías, es cuando se nota la muy urgente solicitud del escaso producto a base de trigo elaborado en países productores del sólido cereal, que más conocido con la designación de “harina de trigo”, en cambio la “harina de maíz”, ocurre otro axioma que agregan ingredientes anexos embolsado en unidad o saco de “cincuenta” (50) kilogramos, para el caso de la azúcar, bien apreciado para elaborar pan dulce,la levadura y el agua en proporción particular; pues en el caso de la “arepa criolla”, los empaques o bultos son de veinte (20) paquetes, suman un peso cercano a los veinte (20) kilos; y su costo se ha incrementado inusitadamente por el macabro ajuste de “dólar today” cada vez que les da la gana.

Valga entender que en un comercio deshonesto, su acaparamiento masivo en galpones comerciales locales, nacionales y fronterizos; han reforzado el significativo hecho antisocial calificado como “guerra económica inducida” en contra del pueblo. Pero, hoy 05 de enero de 2017, cuando por mandato constitucional se ejerce soberanía con el obligado “cambio” de autoridades legislativas en toda la República Bolivariana de Venezuela; saltan las mejores reflexiones ante la peor actuación cumplida por una “descalificada” mayoría parlamentaria, compuesta por “payasos” de circo que siguen negando al pueblo bolivariano y sus propios partidarios opuesto al bienestar colectivo, el más cercano y vigente compromiso de la llamada “participación y protagonismo” que ejerce el socialismo bolivariano por mandato de nuestra Carta Magna.

Haciendo cola allí en “pan-andino”, este mismo 5 de enero, en horas de la mañana, supo el encargado actual expresar una especie de queja con el siguiente tenor: “No sé que van a hacer a partir de Mayo, cuando me valla y venga el nuevo gerente. Esta gente que trabaja acá y he defendido lo más que se puede, tendrá que irse a buscar trabajo con el gobierno”. Todos en la cola para cancelar por caja con tarjeta de débito, volteamos atentos al lamento esgrimido por el susodicho, quedando sin respiración al completar su anuncio con estas palabras: “Vamos a ver que hacen ahora que el saco de azúcar lo trajeron a 180 mil bolívares y el pan hay que subirlo más”.

Creído el señor encargado que nadie iba a responder sus infundadas declaraciones, una señora con no menos de setenta (70) años cumplidos, le contestó su extraño argumento con una chispa margariteña que estas valientes mujeres saben responder, diciendo con voz de mar grueso marinero: “¡Bueno Mi'jito, y será que tu eres gafo o nos ves cara de idiota a todos nosotros! Es que ahora vas a dedicarte a vender pan salado relleno de azúcar, como es verdad que tu eres bien necio...

Las y los presentes, en el referido local comercial, a una sola y automática exclamación reímos tanto, por la que se deberá considerar como el peor anuncio en medio de una igual inducida cola para la mayoría bolivariana; cuando solo digo: Afirmo continúa guerra económica inducida ante primera cola de 2017.