¡Luna Roja! Algún igual con la fantasía es pura ilación

¡Luna Roja! Algún igual con la fantasía es pura ilación

La Voz del Río/Opinión

Paz, Amor y Libertad

Que haya sido el suceso más importante -o no- en la segunda década del siglo XXI, con la Luna de color “rojo sangre”, como se le califica en la prensa mundial, lo cual puede ser discutible, ante otros sucesos siderales en nuestro conocido cercano universo, por las características que lo animan, o las tipologías observadas como rarezas presenciadas por no pocos mortales, en los últimos ochenta (80) años y más de permitida existencia humana. Hasta ahora todo está en revolución.

Recuerdo que, y en ésta pasada noche del domingo 27-S lo comenté a la familia, a pocas personas conocí que observaron el paso por dos veces del Cometa Halley, el pasado siglo XX; ello separadas en dos fechas cada 76 años, cuando vieron su tránsito por primera vez en abril de 1910, y con edad longeva, la segunda oportunidad en febrero de 1986; aludido su inolvidable experiencia al observar el coloso celestial en dos avistamientos diferentes; siendo niñas o niños y luego adultos mayores.

Leí que cada “33 años” ocurre el suceso celestial-terrenal de sombra sobre la Luna, y quise recordar que hacía para el año de 1982; puesto que, si puedo evocar tareas y dramas cumplidos en mi niñez, juventud y adultez; cómo no voy a recordar ese particular día del seguro eclipse de la Luna Roja, que algún igual con la fantasía es pura ilación; rayado con tinte de sangre, en la señalada época de los “años perdidos” de la entonces “Venezuela Portátil”, ganada por la corrupción, derroche y populismo; que negado por la actual mínima generación opositora sin proyecto político-social-económico-cultural jamás antes visto.

Bueno, recuerdo que no tenía trabajo, no cursaba ni estaba inscrito en ningún programa académico de formación profesional; y aunque pendía de labores a destajo mal remuneradas por no portar un carnet “blanco o verde”, la tabla de salvación flotaba entre hacer labores culturales-teatrales y radiofónicas-artesanales cargadas de embustes democráticas; lo demás se amplificaba entre sueños y fantasías, puesto no había recibido malas enseñanzas ni andaba con picardía o engañando a nadie y no encajaba entre los clasificados del recordado Dr. Uslar Pietri, como flamantes “pendejos”.

Actualmente hay oportunidad de trabajo, estudio, formación militar, libertad de expresión, medios informativos que se dedican a mentir y pocos a ser veraces,  transmitir verdad sin caer en nimiedad ni discordancia; cuando complementa contar con muchas leyes y tremenda Constitución Bolivariana que es garantía de Paz, Amor y Libertad.