Un maestro de escuela que hizo escuela en el periodismo
Fuente: MinCultura Nueva Esparta
Lic. María Eugenia Guerra
Un maestro de escuela que hizo escuela en el periodismo |
Formador de
generaciones, Chuchú se dedicó apasionadamente al periodismo escolar y fue un
celoso vigilante del uso correcto de nuestro idioma
Jesús Chuchú Rosas Marcano, periodista y poeta margariteño nació en la
ciudad de La Asunción, estado Nueva Esparta el 5 de enero de 1931 y murió en
Caracas el 7 de mayo de 2001. Su madre fue Isidra Marcano de Rosas y su padre,
Juan Baustista Rosas, quien tenía una bodega en la esquina de Brito de su
ciudad natal, a la que una vez calificó como “un pueblo de fantasmas”.
Realizó sus primeros estudios en la escuela Francisco Esteban Gómez.
Culminados estos, su padre lo envió a la ciudad de Cumaná, estado Sucre, a
estudiar en la Escuela Normal para la formación de maestros, donde, al comienzo
tuvo algunos tropiezos, sin embargo, demostró tener la actitud de todo alumno
aplicado y al culminar el tercer año convenció a su padre para terminar su
carrera en Caracas, en la Escuela Normal para varones, Miguel Antonio Caro.
Nuestro biografiado no poseía vocación magisterial propiamente dicha,
debido a que su gran aspiración era la de ser grumete de la Marina Mercante,
aunque no fue aceptado por no tener la edad reglamentaria y no le permitieron
hacer el examen en un buque escuela ubicado en Pampatar, Isla de Margarita.
Su gran refugio en tiempos de dictadura
El maestro Rosas Marcano se había matriculado para estudiar derecho en la
antigua sede de la Universidad Central de Venezuela, en la esquina de San
Francisco. La UCV fue clausurada por el gobierno de Pérez Jiménez y cuando se
reabrió, en el año 1954, ya él había perdido su interés por los estudios
jurídicos y entonces se inscribió en la Escuela de Periodismo donde aseguraba
“había aprendido a leer”.
Entre sus grandes maestros estuvo Mariano Picón Salas, Luis Beltrán
Guerrero y en la especialidad propiamente periodística, el profesor Guillermo
Korn, una persona que según Rosas Marcano, “él solo ya era una escuela”. Jesús
Rosas Marcano entra a ejercer el periodismo de opinión estando en el segundo
año de la carrera y lo hace en el diario Últimas Noticias. Allí el
poeta firmaba sus notas con el seudónimo de Ross Mar. En ese mismo medio inició
el reporterismo de calle. En las revistas Élite y Venezuela
Gráfica, realizaba comentarios de libros, investigaciones y reportajes,
comenzando con pie derecho su carrera en el mundo del periodismo.
Estudios de Postgrado en París
Cuando el poeta Rosas Marcano culminó sus estudios en la Escuela de
Periodismo, obtuvo una beca del Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico
de la UCV para cursar estudios de postgrado en la Universidad de la Soborna, en
París. Su tutor fue el ilustre profesor de políticas comunicacionales, Jacques
Kayser.
Uno de sus trabajos más importantes en París, fue cuando le tocó seguir, en
111 diarios franceses, el lanzamiento de la candidatura del canciller Konrad
Adenauder, quien para ese momento aspiraba a la presidencia de Alemania.
De esta manera la prensa mundial se hizo eco del trabajo de Chuchú Rosas
Marcano quien fue considerado por los estudiantes del seminario como muy
válido, porque poseía las características esenciales del acontecimiento. Ese
trabajo terminó convirtiéndose en su tesis de grado.
Simultáneamente también realizó otra investigación sobre la imagen de la
Guerra de Independencia de Venezuela en París, la cual sirvió para dar a
conocer todas las vicisitudes de la Guerra de Emancipación Americana desde una
óptica europea.
Regreso a Venezuela y su gran aporte al periodismo
Después de casarse con Dora Flunger, con quien tuvo tres hijos, se inició
en la docencia universitaria en 1960 y fue asignado como investigador en el
Instituto venezolano de Investigaciones de Prensa, el cual había sido fundado
dos años antes por Ramón J. Velásquez.
Estos dos trabajos simultáneos le permitieron a Rosas Marcano realizar
muchos trabajos de prensa histórica, con los cuales llegó a tener más de seis
mil referencias de la prensa infantil y la prensa escolar.
De allí comenzó una intensa actividad para implantar el uso del periódico
escolar moderno en las escuelas nacionales, con más arraigo en la ciudad de
Caracas. Fue al campo del periodismo para niños al que Rosas Marcano dedicó su
esfuerzo para llevar la actividad de la prensa a toda la infancia, impulsando
en ellos el hábito de la lectura.
Contribuciones a la cultura y educación venezolana
Escribió canciones colaborando así con la cultura musical venezolana. Son
más de 70 las piezas escritas por el maestro Chuchú Rosas Marcano y que grupos
como Un solo pueblo, se ha encargado de darle popularidad a las letras como Botaste
la bola, La Marcha de los pendejos, Quítame la
mano.
Entre los proyectos de Rosas Marcano al periodismo infantil figura el
suplemento Martes Infantil aparecido en diciembre de 1976 encartado
en La Voz de Catia. Este periódico marcó el comienzo de este gran
objetivo, La Pájara Pinta fue otro proyecto similar que encartaba en el diario El
Nacional.
Con el mismo ánimo emprendió trabajos similares con Glo-Glo, en el diario El
Globo y en El Diario de Caracas con el espacio
Presencia Juvenil, lleno de gráficas en colores, por el cual mantenía un
contacto con estudiantes de bachillerato.
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