Nuestra Señora en El Valle del Espíritu Santo de la Isla de Margarita

Fuente: La Voz del Río/ Cultura
Abg. Edinson Lares Rojas

Nuestra amada Vallita: La Virgen Bonita

...  Miramos a la virgen bonita con ojos suplicantes por nuestra salud, vemos en ella la gracia divina de una madre, que como la nuestra –presente o ausente- la adoramos espiritual sobre su inconmensurable don. No sabemos de sufrimiento con su imagen, no deseamos mal a otros ni a nadie con buena voluntad para conjugar alegría, bondad y amor; y por la bendita gracia que siempre arroja entre nosotros, no conocemos más tranquilidad y sosiego que su inmaculada bondad de sanar y proteger.

De hecho, en las horas más difíciles de cada existencia humana, una oración activa su milagrosa voluntad de curar todos nuestros males. Cuando la invocamos, quienes creemos en sus sublimes milagros, para muchos comienza dentro si, un proceso de sanar espiritual y psíquico poco estudiado; hay quienes pasan días, meses y años tocados por esa gracia divina que no definimos; pero que sí experimentamos cada día de la vida.

Por dar a los demás, lo que ha buena hora y en este bello lugar recibimos con amor para dar, llamamos simple y sin confusión: Fe cristiana mariana.

Responder a insinceras absorciones reñidas con la verdad cristiana, es caer en ese vacío argumentar de sacerdotes pediculosos y fariseos que desmiente su trabajo y niega su condición colosal de pastores de la iglesia; para dónde van los que dicen ser sinceros, no es precisamente para ese lugar que desmiente el poder que reside en el pueblo, que ama a sus iconos y profesa la bondad de nuestro señor Jesucristo; quien para todos, es fuente de luz en la vida.

Nuestra Vallita llegó a nosotros traída desde Cubagua, con esfuerzo de aborígenes autóctonos de la etnia sobreviviente de los Guaiquerí, y eso ocurrió en aquellos primeros días de enero del año 1542; golpeada la isla por descomunal tormenta y no “maremoto”. Nuevas investigaciones refieren la llegada a la isla de Cubagua, en la ciudad de Nueva Cádiz, de la sagrada imagen para el año de 1518. Si eso es verdad y prueban los historiadores; cierto o no para los pueblos seguidores de los insignes milagros de Vallita, seguirán siendo motivo de estudio y razón de trabajo por aclarar lo que ya en sumario es historia.

Que nos vamos a dar con palos y piedras por esa nueva información; bueno, para esta época hablar con serena razón de los derroteros de nuestra sublime devoción por la virgen bonita, así como de nuestro “socialismo cristiano” que desaprueba repetidas mentiras de odiosos pederastas; no lancen la idea de caminar la senda del descrédito público, con insinuadas canalladas de las que se hacen eco supuestas víctimas agasapadas, porque si temen -o no quieren- se quite mil privilegios obtenidos a fuerza de “blandir la espada hecha cruz heráldica”, bajo la tejida mentira que el comunismo es igual al socialismo bolivariano del siglo XXI…

Le pido a nuestra amada Vallita, les conceda el milagro de cambiar su maldad religiosa para que sean con la gracia de Dios, por los siglos de los siglos: más seres humanos.

Viva la patrona de los orientales y la virgen más bella en todo el Planeta.

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